La alimentación -entendida esta como parte constituyente de las dinámicas socio-culturales actuales- está sujeta a los fenómenos globales en los que las sociedades modernas actuales se encuentran inmersas. En un periodo de crisis socio-económica la alimentación, el acceso a los alimentos, puede verse fuertemente alterado en mayor o menor grado. Pero dicha crisis; ¿afecta sólo a los aspectos materiales de la alimentación o, por el contrario, implica también una dimensión sociocultural más amplia que afecta a los estilos de vida de modo más integral? Para dar respuesta a esta y otras preguntas relacionadas se ha llevado a cabo en los últimos años y en diferentes fases (2010-2013, 2013-2015 y 2015-2017) un trabajo de campo con entrevistas en profundidad en diferentes estructuras familiares de diferentes características socioeconómicas de la comunidad autónoma de Cataluña, a través de las cuales los propios actores se adueñan del discurso y nos explican tanto su visión sobre cómo la crisis socioeconómica ha influido en su alimentación, como las estrategias que han puesto en marcha para hacer frente a esta transformación forzada de sus hábitos alimentarios cotidianos y cómo estas estrategias han evolucionado a lo largo de los años. En esta comunicación presentamos los datos de la última fase de la investigación, correspondiente a 2015-2017, y que coincide con, hasta el momento, los que parecen ser los últimos años de la crisis socioeconómica en Cataluña y en España.

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