Mutaciones destotalizantes: artistas contemporáneos de Cuba y Nicaragua migrantes en México.
Entre 2018 y 2021 artistas de Cuba y Nicaragua realizaron prácticas artísticas respondiendo a un contexto autoritario y de alta represión de Estado. En estos momentos la mayoría de estos artistas han migrado hacia diferentes destinos incluyendo México. Siendo yo misma una artista y antropóloga cubana radicada en México me pregunto cómo los artistas cubanos y nicaragüenses han respondido a una experiencia de autoridad a través de sus prácticas y cómo lo hacen ahora bajo la condición de migrante. Me interesa comprender la capacidad destotalizante de sus prácticas, es decir, la capacidad de producir narrativas fuera de aquellas impuestas por los partidos únicos (PCC y FSLN). He asumido como metodología de investigación la práctica curatorial como práctica etnográfica (Elhaik y Marcus 2012, Elhaik 2017, Sansi 2020), curar en cuanto proceso colaborativo, de larga duració y de investigación durante el cual se produce conocimiento. Para ello curé la exposición “No somos memoria” con artistas cubanos y nicaragüenses en Centro Cultural Casa del Tiempo, CDMX y organicé tres conversatorios llamados “Deshijar. Artistas en el exilio”. Pretendo incorporar a la discusión sobre prácticas artísticas con un compromiso social una mirada ubicada en la región caribeña y centroamericana. En las últimas décadas el arte socialmente comprometido ha sido analizado por teóricos ubicados en EUA y Europa principalmente, en oposición a las relaciones sociales dominadas por la sociedad del espectáculo. Me propongo sumar a dicha discusión la práctica de artistas cubanos y nicaragüenses interesados en proponer nuevas formas de relacionamiento ante una situación política específica.
(*)El autor o autora no ha asociado ningún archivo a este artículo