IDENTIDAD Y EDUCACIÓN INTERCULTURAL
Latinoamérica y por supuesto Colombia, se caracterizan por ser regiones histórica, social y culturalmente diversas. Es significativa la presencia de grupos mestizos, indígenas, población afrodescendiente, raizales y ROM (en menor medida). Así mismo, son múltiples los matices socioculturales que hacen parte de nuestra cotidianidad, a través de expresiones representadas en el estrato social, la orientación sexual, la religión, la política, la territorialidad y los niveles de discapacidad, entre otros. Este complejo panorama exige un sistema educativo igualmente complejo, que esté en capacidad de leer los nuevos desafíos tanto locales como globales; uno que dé respuestas a través de atrevidas propuestas pedagógicas integradoras, que contemple el diseño de currículos flexibles, propositivos y críticos, así mismo, la implementación de didácticas especializas y altamente flexibles. Es en este sentido que surge la preocupación por una educación intercultural pensada desde y para la diversidad, que vaya más allá de proponer recetas, recomendaciones y orientaciones, una educación en la que predomine el reconocimiento y aceptación del otro en cuando diferente, no inferior, no superior; “otro” simplemente diferente.
(*)El autor o autora no ha asociado ningún archivo a este artículo