Existen diversas iniciativas que llevan a cabo la intervención social mediante técnicas artísticas, que permiten abordar los problemas sociales desde otro prisma distinto al modelo clínico tradicional. “La actividad artística actúa como mediadora, es decir, el objetivo fundamental no es que las personas que participan aprendan arte, sino que la actividad es una herramienta para incidir en otros objetivos, encaminados a fomentar la autonomía de las personas y a promover procesos de inclusión social”. (Moreno 2010:2) Dos elementos centrales componen el objeto de estudio, el flamenco y la intervención socioeducativa. A lo largo del trabajo se analiza la relación entre ambos y de manera concreta, las posibilidades de aplicación del flamenco a la intervención en la experiencia Ponte Flamenca, desarrollada en la ciudad de Córdoba entre los años 2012 y 2017. Se trata de una propuesta de trabajo grupal que aplica de la vivencia del flamenco como un canal de transmisión emocional, llegando a superar patrones mentales y a mejorar la gestión emocional.  Se parte de un análisis del flamenco desde dos miradas: como un fenómeno artístico, según Steingress, Lavaur o Wasahbaugh y como un fenómeno cultural vinculado a prácticas sociales, que identifican el flamenco como sistema y patrimonio cultural.