La renovación de los estudios sobre bienes comunales y formas de apropiación que siguieron el camino abierto por E. Ostrom han aportado visiones críticas y plurales sobre los comunales que han sido de gran importancia para la Antropología. Aportaciones como las de Chris Hann o Benda-Beckmann contribuyeron a crear nuevos enfoques y teorizaciones sobre la propiedad y sobre los derechos de apropiación que revisan y profundizan una mirada materialista sobre las formas de apropiación y los sistemas jurídicos y políticos con los que se vinculan. Por otro lado, el auge de las retóricas sobre lo común impregna el debate social y político en una época marcada por la profundización de la desigualdad, la crisis económica y ecológica a escala global, o la precarización generalizada que produce el neoliberalismo. Estos elementos, y una investigación etnográfica sobre formas de apropiación, son el punto de partida para repensar y teorizar sobre la problemática fundamental del gobierno de lo común; un problema político, económico, jurídico y ecológico. Una concepción ampliada y compleja de las relaciones de apropiación, atenta también a las aportaciones de las ontologías críticas, es necesaria para dar cuenta de las transformaciones de las últimas décadas (tanto materiales como teóricas) y para proponer nuevas ideas y conceptos que sirvan a las necesidades sociales de transformación.

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