En la literatura académica sobre instituciones penitenciarias priman las investigaciones sobre el modo en que el tiempo en prisión anula a las personas y las suspende de sus derechos, poniendo el foco en el modo en que el régimen penitenciario reproduce y legitima la exclusión social. Sin negar esta cuestión, quiero presentar una imagen más compleja a través de mi trabajo de campo etnográfico, desarrollado durante un año y medio en una cárcel de mujeres.En esta ponencia quiero analizar el modo en que las mujeres que cumplían condena rentabilizaban su tiempo en prisión, y cómo las actividades que desarrollaban las ayudaban, no solo a sobrellevar los días, sino a planificar el futuro que imaginaban para ellas. Me basaré en narrativas de aquellas con las que más tiempo compartí, acompañándolas en varias de sus actividades, como la escuela, y en su tiempo libre, conversando sobre su vida dentro de los muros: estudios, trabajo, gimnasio, participación en talleres, etc. Mi finalidad es alejarme de la imagen de víctimas que suele asociarse a las personas internas en estas instituciones y subrayar su capacidad de agencia.  

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