Las experiencias migratorias no son similares. Ni siquiera para nosotras, que venimos de dos países y contextos diferentes, sin familia y con el fin de continuar con nuestros estudios universitarios. Si, por una parte, los datos señalan que las trayectorias educativas de los hijos e hijas de migrantes en España se ven mermadas en el instituto pues la mayoría de los alumnos hijos de migrantes no asisten a la universidad debido a su expulsión del sistema educativo, nuestra presencia en! las aula s pone en juego otras dinámicas en las que raza, clase o género resultan fundamentales en el análisis. El sistema educativo español se caracteriza por tener una matriz que es colonial. En este sentido, una de sus especificidades es su inserción en un sistema geopolítico de reparto del conocimiento en el que los recursos, reconocimientos, nichos de trabajo y saberes se distribuyen de modo desigual. La comunicación que se presenta tiene como fin abrir una serie de preguntas vinculadas a la colonialidad del saber, poniendo atención a los vínculos entre la universidad española y la latinoamericana y, en especial, en el caso de Ecuador y Brasil, desde una perspectiva decolonial. 

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