La imagen fotográfica ha sido de las formas más utilizadas para transmitir y divulgar el patrimonio cultural inmaterial (PCI) de las localidades y su contribución a la salvaguardia del mismo es innegable. Su importancia quedó de manifiesto durante la pandemia por Covid-19, periodo en el que las imágenes visuales y audiovisuales que circularon en redes sociales tomaron un papel relevante. Estas imágenes del PCI que circularon coadyuvaron a la trasmisión y divulgación de tradiciones que fueron canceladas o realizadas con un público restringido a causa de las medidas sanitarias impuestas por las autoridades. La trascendencia de estas imágenes durante la pandemia nos lleva a repensar en las distintas formas en que se producen las semiosis fotográficas sobre el PCI (aún poco estudiadas) y cuál es su papel en la salvaguardia. Dado que responden a condiciones de producción, circulación y recepción específicas y están determinadas por el poder y la ideología su análisis es indiscutible. En esta ponencia se presenta el caso de estudio de fotografías que forman parte de los expedientes sometidos ante la UNESCO de algunas expresiones culturales que forman parte de la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.