La violencia que se vive en México, en específico la crisis de desaparición actual, han generado una mayor participación de la antropología en contextos mucho más especializados, como es el caso de la antropología forense. En ese contexto, son múltiples los desafíos que la disciplina debe afrontar, pero en esta ponencia quisiera centrarme en uno de ellos: el papel que la antropología puede tener en los procesos actuales de búsqueda de verdad, justicia y reparación existentes en el país.Sin duda, la antropología puede ayudar a generar diálogos entre distintos actores, a construir nuevas narrativas sobre eventos violentos remotos y a promover prácticas sociales más incluyentes; sin embargo, su presencia en espacios o proyectos en los que actualmente se llevan a cabo procesos de búsqueda de verdad o reconstrucción de memorias es muy débil. En la presente ponencia abordaré uno de los ejemplos en los que, desde mi parecer, la antropología mexicana puede contribuir a un escenario de reparación y justicia. Me refiero a la creación de políticas de memorialización de la ciudad de México, tomando como ejemplo, los casos de toma de espacios públicos (dos glorietas o rotondas en una de las avenidas principales de la ciudad) por parte de colectivos feministas y de familiares de desaparecidos. Una movilización que no ha sido leída desde la reparación y la búsqueda de justicia, en donde la antropología podría coadyuvar a la construcción de un modelo memorilal más incluyente y democrático en la ciudad.