En base a una propuesta de investigación etnográfica en curso y a partir de trabajo de campo en Asociaciones y grupos de apoyo de familias en Cataluña, propongo reflexionar sobre cómo se construyen las nociones de voluntad y deseo, a partir de las experiencias de embarazo y aborto. La medicalización de los procesos reproductivos de las mujeres, la aplicación de nuevas tecnologías de imagen y sonido como herramientas de diagnóstico y la popularización de rituales colectivos durante y después del embarazo, contribuyen a la construcción de «formas de entender la vida» que otorgan subjetividad a los no nacidos y generan un debate social en torno al aborto. Con esta problemática social que se nos plantea, debemos conocer la situación de las mujeres que se enfrentan a una interrupción voluntaria de un embarazo deseado y cómo el sistema da respuesta a estas necesidades, entendiendo las categorías y representaciones que se ponen en juego detrás de estas realidades. Más allá del discurso biomédico imperante, desde la perspectiva que puede aportar la antropología social y cultural, me propongo exponer algunas claves que nos pueden ayudar a entender los significados culturales que se le atribuyen a las diferentes etapas de embarazo, conocer cuáles son las categorías que manejan en el campo los diferentes agentes sociales implicados y las relaciones que se establecen, y plantear unas líneas de análisis para abordar la complejidad de definir los imaginarios y estrategias para pensar la vida y la no vida que se construyen a partir de estas realidades.

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