En Guatemala, la intensidad de la violencia fue variable durante los 36 años de conflicto armado. El período más sangriento fue el de las dictaduras de Fernando Romeo Lucas García(1978-1982) y de Efraín Ríos Montt(1982-1983). En la región ixil entre el 70% y el 80% de las comunidades fueron arrasadas, 6.986 personas fueron ejecutadas y se llevaron a cabo innumerables prácticas de terror -torturas, decapitaciones, violaciones sexuales o destrucción de elementos de la identidad maya- (CEH, 1999). Esta comunicación presenta resultados preliminares del trabajo de campo realizado en la región ixil para una tesis doctoral en curso. Durante este se realizaron entrevistas a agentes implicados en los juicios de genocidio contra el pueblo maya ixil, análisis de fuentes documentales y observación participante. En concreto, la comunicación expone los presupuestos militares con los que se caracterizó a la población ixil y a su territorio como un área de combate a partir de tres documentos: Plan Campaña Victoria 82, Plan Operación Sofía y Operación Ixil. En estos se detallan minuciosamente las operaciones logísticas, operativas y psicológicas que el Ejército llevó a cabo y que, 30 años más tarde, fueron sentenciadas como genocidio. El análisis de los planes presenta como el Ejército retomó los imaginaros sobre el grupo ixil generados por los primeros cronistas que llegaron a la región y se apropió de datos etnográficos generados sobre el mismo grupo. El caso ixil presenta la instrumentalización y el uso político de las ciencias sociales para la intervención militar en América Latina.