AVANCES DEL PROYECTO FINCA : FRONTERAS, IN-MOVILIZACIONES Y NEOLIBERALISMO EN TIEMPOS DE COVID EN LA AGRICULTURA DEL SUR DE FRANCIA
Entre marzo y junio de 2020, la prensa local, nacional e internacional se hizo ampliamente eco de las reivindicaciones de un sector agrícola galvanizado por el deseo de garantizar el recurso sin trabas a la mano de obra extranjera. La crisis sanitaria puso brutalmente de manifiesto la relación de dependencia que la agricultura intensiva provenzal tiene con la mano de obra inmigrante. En la encrucijada entre la investigación y la acción colectiva, el proyecto FINCA considera la pandemia como una oportunidad y una revelación del papel que desempeñan las fronteras en la configuración de espacios de producción agrícolas conectados por la globalización de los flujos de mercancías, trabajo y capital. La crisis de la Covid-19 provocó un cortocircuito en el sistema de empleo. 2000 marroquíes bajo contrato temporal no pudieron entrar. Dentro de la Unión europea, a pesar del confinamiento, la introducción de trabajador@s prestad@s desde España por empresas de trabajo temporal desembocó rápidamente en una crisis sanitaria y económica. A principios de mayo, varios brotes fueron detectados por las autoridades en los sectores de la horticultura, la arboricultura y la viticultura de los Bouches-du-Rhône. Los testimonios recogidos entonces en los caseríos y campamentos provenzales detallan los riesgos laborales y sanitarios ligados a la densidad de los desplazamientos, a la cercanía durante el trabajo, a la promiscuidad en los campamentos, al aislamiento y al control de la movilidad y a la incertidumbre característica del trabajo temporal y agravada por la prestación internacional.