PROTOCOLOS DE ACTUACIÓN SOBRE LOS ASALARIADOS AGRÍCOLAS DURANTE LA PANDEMIA DEL VIRUS COVID-19: EL EFECTO “LA CARTA ROBADA”
Esta comunicación tiene como objeto reconstruir las implicaciones de lo que podríamos llamar la paradoja de los asalariados agrícolas durante la pandemia. Su consideración como trabajadores esenciales tras el primer decreto de estado de alarma por el gobierno de España supuso al tiempo su conversión en trabajadores de riesgo y motivo de alarma pública, en la medida en que se vieron expuestos a un contagio comunitario, tanto en el ámbito de la producción como en el de la reproducción. ¿Cómo no se pudo prever que la estrategia de salud pública iba a mostrarse absolutamente ineficiente para aquellos cuyas condiciones de vida y trabajo les posicionaban en la vulnerabilidad y desafiliación social? La comunicación propone analizar la política pública, concretamente, los protocolos de actuaciones que se definieron durante la pandemia para hacer frente a los contagios de los trabajadores agrícolas. Fundamentando el análisis sobre resultados de investigación empírica en el campo murciano, y contrastando con lo ocurrido en Otras temáticas enclaves de agricultura intensiva se termina concluyendo que, al igual que los investigadores del cuento de Alla Poe sobre “la carta robada”, no vieron lo evidente pues sus protocolos de observación imposibilitaron detectar lo que estaba a simple vista. El Efecto” “la carta robada” es un síntoma de la condición inmigrante, y de los asalariados agrícolas en cuanto inmigrantes extranjeros, en las sociedades contemporáneas.