Esta comunicación propone reflexionar y compartir dos etnografías realizadas por la investigadora durante dos confinamientos diferentes pero con puntos comunes, en dos momentos temporales distintos pero próximos, ambos en relacióna la corporalidad confinada y el medio ambiente. A través de una comparativa de contextos socioculturales, paisajes y tiempos, la antropóloga busca encontrar las sinergias y las resistencias de experimentar la corporalidad confinada, por un lado, debida a un confinamiento político-religioso llevado a cabo entre 2011-2016 en un recinto en Arabia Saudí y, por otro, en su casa, en 2020 en referencia al confinamiento político-sanitario ocasionado por la pandemia del COVID-19. Sumado a esto, contemplaré el papel que desempeñaron los dos paisajes medioambientales -el mar Rojo en Arabia Saudí y los montes de Gipuzkoa- para ensanchar los confines políticos, sociales y metodológicos de ambas experiencias de confinamiento, tanto a nivel material como simbólico, y para descubrir cómo las experiencias corporales individuales se enmarcan en contextos socio-históricos repletos de valores e ideales sociales, religiosos y sanitarios que evidencian la relación entre las percepciones corporales y la violencia estructural perpetrada por los sistemas políticos imperantes.