El Plan Supermanzanas Barcelona aprobado tras la pandemia generada por la COVID-19, es la más reciente apuesta urbanística del Ayuntamiento en materia de movilidad y ha sido promovida desde un discurso basado en el cuidado de la vida urbana y el medio ambiente. Su implementación consiste en el rediseño del espacio público combinando herramientas del urbanismo táctico, para limitar el tráfico vehicular y ampliar las zonas peatonales. La ponencia invita a superar el debate mediático polarizado entre quienes están a favor y en contra de las Supermanzanas, visibilizando los aspectos económicos y políticos que operan detrás de esta reforma espacial. Se toma como caso de estudio, los proyectos ganadores del concurso público para el diseño de las plazas y los ejes verdes propuestos para la transformación del Ensanche. Desde una aproximación etnográfica al diseño de la Supermanzana, se analizará el discurso elaborado por los equipos de arquitectos autores de cada proyecto, a la vez que se clarificarán las normativas urbanísticas creadas para garantizar su ejecución. Este enfoque es propio de un campo conocido como antropología arquitectónica y resulta de utilidad para desvelar los factores ocultos a los procesos de diseño que prefiguran la morfología de la ciudad. Ante la ausencia de políticas urbanas orientadas a regular el precio del suelo y a evitar el desplazamiento de sus habitantes, nos enfrentamos nuevamente a la retórica del cuidado de la dimensión humana de las ciudades en el actual contexto de mercantilización bajo las lógicas del urbanismo neoliberal.