LA SOCIALIZACIÓN Y EL CHOQUE CULTURAL DE LOS TRABAJADORES EXPATRIADOS EN CHINA
En los últimos años, la inversión extranjera directa ha crecido en China, lo que se ha traducido en la instalación de múltiples empresas extrajeras en su territorio con sus respectivos equipos humanos. Esta internacionalización requiere una complicada gestión a nivel económico, legal y sociocultural, así como de las circunstancias personales de las personas involucradas. El aspecto sociocultural es el que nos interesa analizar en esta comunicación, teniendo en cuenta que la figura del expatriado es fundamental en ese proceso de internacionalización. El expatriado debe desplazarse a otro país para realizar su actividad profesional, la cual debe desarrollar de manera estable, lo que va a afectar directamente a su vida personal, familiar y social. Posteriormente, deberá regresar a su país de origen tras un período relativamente largo. El objetivo de la socialización es facilitar la adaptación del nuevo miembro a la organización y al país de destino. En este proceso se produce el choque cultural que requiere un periodo de adaptación en el país de destino y que con la repatriación se convierte en el choque cultural inverso al volver de nuevo al país de origen. Dado que la cultura china puede tener aspectos muy diferentes a la cultura occidental, a través del método etnográfico realizamos una investigación cualitativa para conocer más a fondo y analizar dicho fenómeno que nos permita comprenderlo y afrontarlo.