Por una redefinición del trabajo infantil: los niños y niñas como productores en la economía digital
Una de las bases fundamentales del modelo de acumulación propio de la economía digital es la instrumentalización de la socialidad de los internautas por parte de las plataformas online. Un ingente flujo de contante actividad que, convenientemente algoritmizado, deviene auténtico trabajo digital no remunerado, desposeído de reconocimiento formal y de estatuto. Pese a que en la última década han proliferado las investigaciones focalizadas en la problematización del trabajo digital, existe una ausencia absoluta de estudios que se enfoquen en el análisis de este tipo de actividades digitales productivas desarrolladas por niñas y niños. Según el Instituto Nacional de Estadística, el 88,8% de niños y niñas de diez años usa Internet. Este uso se incrementa entre los 10 y los 15 años hasta alcanzar en esta última edad el 99,2%. Un magma de actividad digital masiva en redes sociales, plataformas y aplicaciones que, convenientemente instrumentalizado y rentabilizado por las corporaciones propietarias de dichos espacios digitales, se convierte en auténtico trabajo productor de beneficio económico, base del modelo de negocio de dichos agentes corporativos. A partir de estas premisas, se hace necesaria una profunda revisión de las pautas tradicionales de categorización del trabajo infantil por instancias como la Organización Internacional del Trabajo. Con este objetivo, desarrollaremos un análisis pormenorizado tanto de las cualidades del trabajo digital desarrollado por la población infantil en las redes y plataformas online, así como desgranaremos algunas consecuencias antropológicas de dicha actividad, particularmente en lo referente a los usos infantiles del asistente virtual Alexa (Amazon).