El turismo urbano ha registrado un crecimiento sin precedentes desde el inicio del nuevo milenio y ha sido acogido en las ciudades de destino como una fuente de desarrollo económico. Con la crisis de COVID-19, las economías urbanas de las ciudades turísticas han sido uno de los sectores más afectados. Para hacer frente a la crisis, las autoridades locales, las oficinas nacionales de turismo y las organizaciones de marketing de los destinos (DMO) se han centrado en la reactivación de la cadena de valor del sector turístico. Por ello, la mayor parte de las ayudas públicas han sido de carácter fiscal tales como reducciones, exenciones de impuestos y moratorias legales.Esta ponencia explora los efectos de la crisis del turismo urbano inducida por la COVID-19 en la ciudad de Barcelona y analiza las respuestas políticas inmediatas y las contramedidas adoptadas por las instituciones gubernamentales locales. Basándose en el análisis de estas medidas a corto plazo, la ponencia subraya cómo la crisis de la COVID-19 ha puesto de manifiesto la necesidad urgente de transitar hacia nuevos modelos de economías turísticas urbanas y nuevos regímenes de (im)movilidades. Por último, se analizarán los discursos críticos y las contestaciones urbanas de los movimientos sociales acerca de cómo reconstruir el modelo turístico y hacer frente a la dependencia económica hacia la movilidad turística en la ciudad de Barcelona.

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