El propósito de este trabajo es exponer que en los contextos locales: en la vida cotidiana de las personas, la violencia se manifiesta de distintas maneras, así mismo tiene significaciones e intencionalidades diferentes. La mayoría de los estudios sobre violencia en México ha prestado mayor atención a los problemas del crimen organizado, incidencia delictiva y aumento de tasas de homicidio. No obstante, la violencia pensada como representación social en el plano empírico tiene expresiones distintas. Formaciones de violencia como: conflictos entre vecinos, riñas entre grupos de familias y peleas en bailes populares que han tenido como consecuencia: homicidios, lesiones físicas, daños materiales y emocionales entre las personas involucradas, han sido menos estudiadas. Estas últimas manifestaciones de violencia se abordaron desde un estudio etnográfico, puesto que consideramos necesaria su comprensión ya que también dejan marcas y daños profundos en las personas; al mismo tiempo que se configuran como una forma de vida que permite comprender cómo las personas desde los márgenes reconfiguran al Estado. La investigación se realizó en una localidad urbana ubicada en la periferia de la ciudad de Xalapa Veracruz, México.

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