Espinosa Zepeda, Horacio(2019). CIUDAD INFORMAL: URBANISMO POPULAR EN MÉXICO.
EL CASO DE LOS TIANGUIS EN GUADALAJARA. ARIES, Anuario de Antropología Iberoamericana,
Chicago
Espinosa Zepeda, Horacio.CIUDAD INFORMAL: URBANISMO POPULAR EN MÉXICO.
EL CASO DE LOS TIANGUIS EN GUADALAJARA.ARIES, Anuario de Antropología Iberoamericana.(Sep, 2019).
APA American Psychological Association
Espinosa Zepeda, Horacio(2019). CIUDAD INFORMAL: URBANISMO POPULAR EN MÉXICO.
EL CASO DE LOS TIANGUIS EN GUADALAJARA. ARIES, Anuario de Antropología Iberoamericana,
Esta presentación es producto de un ejercicio de investigación por siete mercadillos callejeros de la ciudad de Guadalajara, México que consistió en la realización de “derivas”, observaciones participantes, grabaciones de campo, entrevistas “go-along” y entrevistas en profundidad que culminaron en la escritura de un texto etnográfico que intentó ser, como el tianguis: fragmentario y dialógico. La técnica de “las derivas”, imaginadas y llevadas a la práctica por los situacionistas franceses, tradicionalmente se han presentado como un deambular, sin meta alguna y planeación “racional”, que nos conduciría por los entresijos “oscuros” y “olvidados” de la ciudad. Aunque no del todo falso, este tópico sobre las derivas es incompleto ya que estas implican la tensión entre el vagabundeo y un dominio de las variables “psicogeográficas” del espacio urbano, en este caso, del espacio urbano territorializado por el tianguis.
El tianguis es un buen ejemplo de lo social en tanto acontecimiento: podemos contemplar el proceso de creación de toda una formación social, con prácticas y estructuras propias que después se disuelven. Se introduce una ruptura con la inercia cotidiana a partir de los materiales que proporciona la misma cotidianidad. A través de operaciones de transformación del espacio se rompe con la inercia del status quo urbano pero haciendo uso de estas materialidades pre-existentes y en cierta medida opresivas, como el diseño urbano, surge el tianguis como espacio-práctica “no establecida”, y he aquí la paradoja, el tianguis existe a condición de que desaparezca sin dejar rastro. Si desde la perspectiva del tianguero instalar un puesto es el gesto básico de intervención sobre el espacio, para el usuario cada “deriva” es un tianguis.