Apuntes metodológicos desde la articulación entre las emociones, el poder evocador y la memoria.
Al reflexionar sobre el proceso, las emociones emergen sin que la voluntad pueda detenerlas pero sí sentirlas y valorarlas. En ese proceso sensorial también juegan un papel relevante el poder evocador que atraviesa fronteras y anula el tiempo. Se trata de un proceso sensorial que genera emociones. Y todo ese proceso puede quedar a su vez recogido en la memoria. De ahí la importancia de analizarlo a la luz de lo que representa en el proceso de la investigación antropológica. Y de una manera singular en lo que identificamos como El trabajo de campo. En el recuerdo las emociones emergen y plantea la importancia de su interacción y su relación con el poder evocador. Se trata de una aproximación metodológica que puede aplicarse para el análisis
Desde una perspectiva feminista el conocimiento del ámbito emocional nos habla de la vida individual y social de las mujeres.
Que puede situarse a su vez situarse en un campo de análisis y comparación más amplio. El incorporar la memoria es permitir que aflore el recuerdo y el de las emociones abrir la compuerta para recoger el sentir siempre nuevo y diferente.
El conocimiento y análisis de las emociones se enriquece con una aproximación metodológica que desencadene el relato más que en una aproximación encaminada al cuestionario, a la pregunta cerrada. Una metodología donde la antropóloga, antropólogo valoran la inmersión en el contexto donde observan, preguntan, sienten.
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