La modernidad actual, como cultura del riesgo (Giddens, 1995), supone un contexto de duda e incertidumbre en el que los individuos adoptan estrategias creativas con objeto de rehacer los lazos perdidos por dicho proceso modernizador (Maffesoli, 1990). El movimiento psytrance es una realidad que se origina en la India en los 70 y que hoy se encuentra globalizada, dando lugar a un movimiento específico relacionado con la música electrónica que se desarrolla como una forma de espiritualidad holística (Heelas y Woodhead, 2005) La apropiación y resignificación de las herramientas tecnológicas, la alteración de conciencia fruto del uso de ciertas sustancias psicoactivas y la importancia de la música y el baile colectivo, representan los pilares básicos de lo que se ha dado en llamar tecnochamanismo (Reguillo, 2000), en clara alusión metafórica a los rituales chamánicos, y es que los encuentros de este movimiento tienen una dimensión ritual propia de su naturaleza performativa (Turner, 1998). En el contexto actual, donde los debates sobre el estatus jurídico de los psicoactivos se encuentran en auge, el estudio de las realidades donde el consumo de estos forma parte del ethos de algunos grupos cobra vital importancia, pues en la construcción de una política de drogas efectiva y ajustada a la realidad de individuos y colectivos se ha de atender obligatoriamente a la variable de la diversidad cultural, y en este sentido la Antropología debe jugar un papel protagonista. - Giddens, A. (1995) Modernidad e identidad del yo. Barcelona, Península - Heelas, P. y Woodhead, L. (2005) The Spiritual Revolution: Why Religion is Giving Way to Spirituality. Oxford, Wiley-Blackwell. - Maffesoli, M. (1990) El tiempo de las tribus. Madrid, Icario - Reguillo, R. (2000) Emergencia de culturas. Estrategias del desencanto. Bogotá, Norma - Turner, V. (1988) “The Anthropology of performance”, en Performance acts journal publications, pp. 72-98. New York