En una relación intercultural históricamente asimétrica, las formulaciones que afectan a las oportunidades educativas de los pueblos originarios en el sistema público de educación se enfrentan a múltiples resistencias tanto endógenas como exógenas. La enculturación en las escuelas indígenas dificulta el desarrollo de identidades múltiples homologables realmente funcionales ya que el bilingüismo y la biculturalidad no están equitativamente relacionadas en la vida cotidiana. En general, la educación escolar indígena no permite revalorizar la identidad de pertenencia y estimula la permanencia de una relación subalterna con la cultura mestiza dominante. Los procesos de aculturación comienzan desde los primeros grados escolares y se fomenta la tolerancia hacia las pedagogías colonizadoras, creando un imaginario ficticio. Las tendencias que se originan a través de estos procesos educativos neocolonialistas, que atentan contra los derechos culturales reconocidos en las leyes, son conflictivas y contradictorias, tanto las que refuerzan la identidad étnica asumiendo el statu quo subalterno como las que la rechazan buscando vías de asimilación. En la resolución de este dilema apenas existe presencia indígena ya que tradicionalmente, a pesar de los desarrollos normativos en el marco de los derechos culturales, los pueblos originarios quedan relegados de las consideraciones y toma de decisiones relacionadas con la educación. Este trabajo de investigación pretende evidenciar tanto las principales actuaciones del sistema educativo nacional en las escuelas de población indígena ante el reto de los derechos culturales como identificar las respuestas de la población indígena en relación a estos derechos en el Estado de Chiapas.

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