La presente comunicación entronca con la franja más foucaultiana de la teoría queer y enlaza con el estudio localizado de los mecanismos multifactoriales que se entrecruzan en la producción del género y las sexualidades. Desde ahí se señalan algunos elementos que permiten captar los procesos sociales y culturales por medio de los que el poder, el saber y el cuerpo social se imbrican en la conformación de las subjetividades modernas. Dentro de este marco se revisa la figura del “enfermo mental”, cuya constitución no es posible sin tener en cuenta el papel desempeñado por factores que, como los mencionados, exceden con mucho lo estrictamente biológico. A partir de cuatro testimonios de personas que han sido diagnosticadas de esquizofrenia, se señalan algunas dificultades que han vivido respecto de su sexualidad, su orientación del deseo y su género. A través de estas experiencias se extraen diversas estrategias de gestión que es posible poner en juego, a efectos de articular un tipo de agencia que se resiste al control de la vida y los cuerpos. De lo que se trata es de avanzar en un enfoque hermenéutico e interseccional que no desatienda las múltiples sujeciones a partir de las cuales las personas experimentan el sufrimiento y/o ensayan formas posibles de resistencia a una determinada mirada normativa, taxonómica y punitiva, inscribiendo su experiencia en otras lecturas posibles.

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