Partiendo de la idea de que la prisión supone un espacio/tiempo marcadamente sexista, androcéntrico y discriminatorio para las mujeres, en el que se (re)producen unas determinadas relaciones desiguales de género, se plantea abordar el papel de la escritura, entendiéndola como una de las prácticas de resistencia que las presas son capaces de desarrollar y llevar a cabo para afrontar algunas de las dificultades y limitaciones que acarrean el encierro y la privación de libertad. Así, tomando como marco teórico referencias antropológicas y feministas, se pretende mostrar una de las dimensiones más importantes de la agencia de las mujeres reclusas -agencia, muchas veces, infravalorada e invisibilizada- a través de la identificación de algunas de las fisuras que encuentran y crean en el sistema penitenciario; ya que, en ocasiones, al escribir pueden obtener cierto bienestar, neutralizar algunos de los efectos del encarcelamiento y de la opresión de género que supone, y/o hacer frente a la institución penitenciaria. En la comunicación se analizarán los escritos de una mujer -a la que llamaré Simone- que ha estado en prisión, entrevistada en el contexto de la tesis doctoral "La cárcel como institución de género: vivencias, resistencias y estrategias de las mujeres presas".

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