La memoria puede ser una herramienta poderosa para reconstruir identidades en los sujetos de una comunidad que, debido a la problemática de la cotidianidad, parecen perderla o difuminarse ésta. La comunidad de San Nicolás de Esquiros se conforma en y debido a la hacienda del mismo nombre, desde la época de la Colonia en México, pasando por varios eventos socio-históricos. Ésta surge en una preexistencia, la hacienda misma, transitando de grupo campesino subsumido a las decisiones del hacendado a comunidad ejidataria y ahora a pueblo subyugado al sistema capitalista. La ex hacienda es la única en la región puesto que se conserva completa en su estructura morfo-espacial y en propiedad comunitaria. Esto ha conllevado varios problemas económicos, sociales y espaciales, ya que por ser rural, no ha recibido apoyos reales por parte del Estado. Es así que si bien la ex hacienda es parte indisoluble de su ser comunitario, los pobladores parecen vivirla sólo como objeto de uso, conllevando deterioro en ella e incluso en su propia apreciación como comunidad. Esta ponencia es parte de una investigación doctoral que da cuenta de cómo por medio del instrumento etnográfico de la memoria, se pudieron reconstruir las identidades de una comunidad rural participante de un espacio preexistente. Por medio de este instrumento, las personas volvieron presente, ´recordaron´, lo que las había constituido como comunidad, siendo la ex hacienda parte fundamental para ello. La construcción de relatos permitió visibilizar lo que se encontraba en la existencialidad de la comunidad.