ANTROPOLOGÍA Y DANZA: DESLIZANDO EL INTERÉS HACIA LAS DANZAS ARTÍSTICAS EN LA “SOBREMODERNIDAD”.
En esta comunicación presento, en primer lugar, el estado de la investigación en danza desde la antropología. El tema se ha tratado desde los comienzos de la disciplina, aunque, en general, no como elemento específico, sino como parte de otras prácticas que suponían el foco de interés. Fue en la década de los 60 en Estados Unidos, cuando el subcampo “antropología de la danza” se consolida como tal con autoras como Kaeppler, Kurath o Hanna. El interés recayó mayormente sobre las llamadas “danzas étnicas o folk”, interés que respondería a una etnografía de corte más clásico. Ya en esos primeros años, surge la dicotomía danza étnica-danza artística a la hora de tratar el tema. Desde aquí, se aboga por la disolución de tal dicotomía, ya que las danzas artísticas presentan una experiencia dentro de la vida humana (Kurath, 1960), que ayuda a comprender la totalidad social (Kaeppler, 1991). A pesar de esto, los estudios sobre danzas artísticas han sido mucho menos numerosos que los centrados en “danzas étnicas o folk”.
A este respecto, cabe mencionar, en segundo lugar, a Marc Augé. Para éste, en la era de la “sobremodernidad” (Augé, 2006), es necesario “deslizar los centros de interés y el cambio de las problemáticas” (Augé, 2006). Es por ello que desde este trabajo propongo la necesidad de “deslizar” el interés de la investigación en danza desde la antropología hacia las llamadas danzas artísticas.
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