Se entiende por prohibicionismo a la política de drogas vigente: un aparato legal, pero sobre todo conductual (microprohibicionismo) y discursivo que ha evolucionado históricamente anclándose en torno a diferentes problematizaciones (religiosas, raciales, de los placeres, del cuerpo, de la salud) hasta consolidarse a mediados del S.XX. Sin embargo, desde la segunda década del S.XXI, voces procedentes de diferentes ámbitos del activismo, la política, la investigación, la academia, la educación, los medios de comunicación y el arte, entre otras disciplinas,están cuestionando la legitimidad de dicho discurso. En el Estado Español, la acción política del movimiento cannábico y la proliferación de Clubes Sociales de Cannabis actúan como catalizadores de un proceso de normalización o “asentamiento cultural” que señala la necesidad de reabrir el debate sobre drogas. La presente comunicación divulgará los resultados de una investigación llevada a cabo desde la Comisión de Estudios para la Regulación del Cannabis en Andalucía a fin de dar cuenta de dicha normalización, analizando tanto los clubes cannábicos como los discursos y prácticas de los diferentes agentes sociales implicados (usuarios, vecinos, consumidores, políticos, …).Se prentende así contrastar la veracidad del argumento prohibicionista que supone la existencia de "intereses ocultos" en el entorno cannábico analizando los orígenes y contextos socioculturales de cinco asociaciones cannábicas andaluzas. 

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