Esta propuesta basada en el desarrollo de trabajo de campo en un barrio de Vallecas (Madrid) propone analizar la interrelación entre las políticas urbanas, centradas especialmente en políticas de vivienda, y la construcción y reproducción de desigualdades desde una perspectiva historicista que permita reconstruir las resignificaciones sociales sobre la periferia producidas en el contexto estudiado. En el año 1950 el pueblo de Vallecas se incorpora a la ciudad de Madrid, formando un nuevo distrito municipal, lo que marcará su inicio como contexto periférico respecto al centro urbano madrileño. Esta dicotomía entre centro/periferia geográfica se replicará en otras múltiples variables que marcarán las condiciones estructurales de la población del nuevo distrito. Periferizar la periferia constituye una dinámica política, económica y social que reproduce las desigualdades y afianza esta dicotomía consolidando contextos de periferización, que como en el caso de Vallecas, cincuenta años después, vuelve a reproducirse ahora también en su nuevo barrio: el Ensanche de Vallecas

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