Esta ponencia tiene el objetivo de mostrar los conflictos inherentes a la “interlegalidad” o pluralismo jurídico en dos comunidades indígenas (San Pablo Ixáyoc y Santa Catarina del Monte, ubicadas en la sierra de Texcoco al oriente de la Ciudad de México), con respecto a la adjudicación de la ciudadanía en algunas mujeres pues en estos lugares, el grupo doméstico es representado por la pareja-hombre, pero cuando la mujer no tiene pareja, entonces ella es considerada la representante de su grupo doméstico bajo el término emic de “madre soltera”, y por tanto ciudadana en su comunidad. En los casos en donde las mujeres no están de acuerdo con dicha categorización, éstas han acudido a diversas instancias a su alcance para negociar las responsabilidades que tienen en sus respectivas comunidades pero también para ejercer derechos que consideran universales. Lo anterior será evidenciado a través de casos etnográficos en donde los actores sociales planean estrategias para la resolución de sus conflictos o para negociar las normas internas. En estas comunidades cobra sentido el término  “pos indígena”, el cual refiere que si bien el elemento lingüístico dejó de ser el principal componente definitorio de identidad (cuentan con menos de 100 náhuatl hablantes en poblaciones de más de 2,000 hasta 5, 000 personas, respectivamente), el sistema organizativo, basado en lazos de reciprocidad tiene hoy día un papel predominante como instancia creadora de normas prácticas y flexibles, que regulan la vida social, lo cual se incrusta dentro de los usos y costumbres o también llamado derecho consuetudinario. 

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