Toda ruptura epistemológica implica una escisión. La producción de conocimiento descansa sobre un ejercicio de disociación respecto de las concepciones del sentido común y las nociones inmediatas sobre la realidad social. Existe una separación lingüística (la jerga académica), una separación espacial (universidades) y un cúmulo de segregaciones (disciplinas). Esta pauta seccionadora distingue jerárquicamente entre sujetos (investigadores) y objetos (investigados), así como entre saberes mundanos (inmanentes) y conocimientos científicos (trascendentes). La separación ha constituido clásicamente un ingrediente sustancial de las ciencias sociales. Toda perspectiva reflexiva y dialéctica de la investigación social debería cuestionarse esta pauta ontológica de las ciencias sociales. Parte básica de este propósito es el despliegue de una racionalidad intersubjetiva a partir no sólo de metodologías colaborativas, sino también de nuevos lenguajes y modos creativos de comunicar las investigaciones a la sociedad. En este sentido, la familiaridad de cada vez más personas con las narrativas seriales televisivas invita a imaginar formas de hibridación entre investigación social, ecosistemas mediáticos y cultura popular. A partir de la iniciativa Life as a Novela, un proyecto de sociopraxis desarrollado en Nueva York a través de la experimentación comunitaria con la ficción televisiva serial, propondremos pistas metodológicas para la articulación investigadora con las historias y las prácticas narrativas.

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