Barcelona es una ciudad  gayfriendly donde existen diferentes recursos de ocio homosexual, entre ellos las saunas gay. Dichos lugares son espacios que facilitan los encuentros sexo-sociales entre los hombres. Según algunos estudios los usuarios de sauna son uno de los grupos con la prevalencia de VIH más alta en la ciudad. Por el uso que hacen de este espacio los trabajadores sexuales masculinos (TSM) merecen especial atención. Sin embargo, se sabe poco sobre sus condiciones laborales y cómo influye el modelo de masculinidad en la salud de estos hombres, donde la misma búsqueda de poder a menudo da lugar al riesgo. El objetivo de este estudio es conocer, desde la perspectiva de las masculinidades, cómo se articula la sexualidad del riesgo y el sexo seguro en los TSM usuarios de saunas gay. Se han realizado entrevistas en profundidad y observación. Los resultados muestran que los TSM son un grupo especialmente vulnerable, entre otras cosas por el consumo de drogas y por la irregularidad administrativa-legal en la que se encuentran muchos de los que son inmigrantes. Entre sus clientes y sus parejas sexuales no comerciales se encuentran hombres y también mujeres. Las prácticas sexuales de riesgo suelen estar relacionadas con el deseo sexual, la orientación sexual y otros factores de carácter social y personal (como la falta de red de apoyo y sentimientos de soledad). El trabajo sexual permite mejorar el status económico y por lo tanto refuerza un modelo masculino de proveedor de recursos.

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