La práctica regular de actividad física ha sido identificada como un factor protector para la salud. Sin embargo, gran parte de la población no realiza actividad física acorde a recomendaciones establecidas. Además, la práctica es desigual: disminuye con la edad, es más baja en mujeres, minorías étnicas o en personas con menor nivel educativo o socioeconómico. Se realizó un estudio cualitativo con enfoque interseccional con el objetivo de interpretar la influencia de la desigualdad social de género, y su interrelación con la posición socioeconómica y la edad, en los significados y usos del cuerpo y el cuidado de la salud en relación con la práctica de actividad física en mujeres y hombres residentes de un departamento Colombiano. Los hallazgos evidencian que la práctica de actividad física cambia a lo largo de la vida siguiendo trayectorias de práctica que se distinguen por diferentes vivencias en torno al placer, el cuidado del cuerpo y la salud. Estas trayectorias están enmarcadas en nociones y usos generizados del cuerpo que entran en diálogo con la estructura social dada por la posición socioeconómica y la edad, y se caracterizan por un poder desigual sobre el tiempo y el propio cuerpo. Las intervenciones tendientes a incrementar la práctica de actividad física deben enmarcarse en políticas y acciones intersectoriales que propendan por la igualdad de género.

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