¿Cómo se transforman a lo largo del tiempo los roles productivos y reproductivos de las mujeres agricultoras? ¿Qué elementos de la estructura familiar tradicional se perpetúan durante sus historias de vida, de sus trayectorias educativas, laborales, familiares y migratorias, y cuáles se transforman? ¿Cómo son los procesos de empoderamiento y acercamiento al feminismo? ¿Qué posibilidades y tensiones se desprenden al problematizar las relaciones de género?   En este trabajo realizamos un análisis etnográfico de un grupo de mujeres bolivianas de origen campesino que se dedican a la horticultura en Argentina. Se encuentran agrupadas en una organización gremial rural, donde participan de un espacio llamado “Rondas de mujeres”. Allí se trabaja desde la educación popular tejiendo redes de autocuidado, contención y empoderamiento feminista. Se parte de la enunciación de la propia experiencia de vida para analizar la realidad cotidiana, visibilizar el carácter estructural de las opresiones patriarcales, y desplegar estrategias individuales y colectivas para enfrentar la violencia de género y la desigualdad en los hogares, el trabajo, la organización y la sociedad. La observación fue complementada con entrevistas biográficas a diez productoras participantes de las rondas. Reconstruimos sus trayectorias prestando especial atención al lugar de las mujeres en distintos ámbitos: hogar de origen, educación, migración, trabajo, familia actual. Indagamos en las formas de conciliación familiar y, apelando a las discusiones sobre género implícitas en el diálogo que entablamos por la complicidad generada en las rondas, a la reflexividad propia de las entrevistadas sobre las desigualdades de género percibidas en esos recuerdos.

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