La cuestión principal de la ponencia se centra en el análisis del Programa Nacional de Planificación Familiar y Salud Reproductiva, el cual fue puesto en marcha bajo el segundo mandato del presidente Alberto Fujimori en 1995 y finalizó en el año 2000, para ser más concreto, sólo abordaremos uno de los ocho subprogramas, titulado: Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria (A.Q.V.). Por un lado, hablaremos del choque entre los discursos: el Estado (Fujimoristas), la Iglesia Católica, y algunas organizaciones feministas. Donde veremos un punto de inflexión tras las publicaciones de documentos y testimonios que denunciaron violaciones a los derechos humanos por parte de miembros de asociaciones no gubernamentales, dirigidas directa o indirectamente por el Ministerio de Salud forzando a las indígenas a esterilizarse, captándolas a través de amenazas, engaños publicitarios o en ultima estancia por la fuerza. Por otro lado, reflexionaremos de cómo la Anticoncepción Quirúrgica Voluntaria se dirigió a ciertos grupos de poblaciones andinas y amazónicas, que no estaban relacionados con los términos de la medicina occidental, produciendo una exclusión del sistema de salud causado por la ruptura entre la fertilidad y el cuerpo. Ya que la infertilidad es considerada como un tabú, relacionándose directamente con la identidad de la mujer y del hombre y con sus capacidades reproductoras. Pero también, quedaron excluidas de sus comunidades y de la justicia, manteniéndose el juicio a la espera de que la fiscalía decida investigarlo.

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