La violencia obstétrica es un tipo de violencia institucional, estructural, simbólica y directa ejercida contra las mujeres en el ámbito de la atención biomédica a los procesos de embarazo, parto y puerperio. Desde principios del siglo XXI las malas praxis, faltas de respeto y las altas tasas de intervencionismo, medicalización y patologización de los procesos reproductivos femeninos se han ido recogiendo dentro de este término. En los últimos años, varios movimientos activistas multidisciplinares a favor de un cambio de paradigma en la atención al parto hospitalario han dado voz a este fenómeno con el objetivo de visibilizar, prevenir y erradicar la violencia obstétrica no sólo en España, sino también a nivel transnacional, llegando a ocupar espacios en los distintos medios de comunicación. No obstante, algunas sociedades y profesionales médicos han manifestado un profundo rechazo al reconocimiento de la violencia obstétrica como parte de la realidad social y han declarado no encontrarse en disposición de asumir la alusión del término hacia la práctica médica cotidiana. A lo largo de esta comunicación analizaremos las últimas respuestas de sociedades médicas como la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, entre otras, como resistencias biomédicas a reconocer la violencia obstétrica como una serie de prácticas y tratos dentro de la atención sanitaria al parto.

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