AIBR http://www.aibr.org Registro AIBR, SSCI text/plain; charset=utf-8 TY - JOUR JO - ARIES, Anuario de Antropología Iberoamericana TI - MADRES CLANDESTINAS: LAS FAMILIAS LESBOPARENTALES EN EL LÍMITE DE LAS FRONTERAS VL - IS - 2019 PB - Asociación AIBR, Antropólogos Iberoamericanos en Red T2 - ARIES, Anuario de Antropología Iberoamericana PY - 2019 M1 - SN - 2530-7843 UR - https://aries.aibr.org/articulo/2019/20/763/madres-clandestinas-las-familias-lesboparentales-en-el-limite-de-las-fronteras DO - doi: AU - Mercè Falguera Ríos A2 - A3 - A4 - A5 - A6 - A7 - SP - LA - Esp DA - 20/09/2019 KW - AB - Spanish: Vivir en la clandestinidad supone que sólo se habla cómoda y libremente cuando se tiene delante a otro igual. Así se comportan las madres clandestinas, esas madres que no han podido expresar libremente que son la otra madre de la criatura, que viajaron desde España a un país de América Latina a por su hija y fueron la cuñada o la amiga de la mujer que adopta. A pesar de todos los avances legislativos las diferencias de reconocimientos de los derechos de las personas LGTBQI en los diversos países iberoamericanos producen una clara vulnerabilidad en las familias lesboparentales y sobre todo en el reconocimiento de los derechos de sus hijos e hijas. Esas madres que han sido clandestinas a momentos, que han estado ahí, pero en secreto, aparecen en las narrativas etnográficas de mi investigación sobre las maternidades de las mujeres lesbianas en Catalunya: - Una pareja de mujeres que se planteó adoptar a una criatura en Nicaragua, cuando todavía en España no era legal ni el matrimonio ni la adopción por parte de personas del mismo sexo: una era la persona que adoptaba y la otra era la cuñada que la acompañaba en el viaje. Esa era la imagen de cara a las autoridades de aquí y de allá, en el hotel las dos eran las madres - Iniciar un trámite de adopción internacional como mujer sola, sin explicar nada, esperando que no preguntasen, guardando el secreto y cuando preguntaron si tenía pareja “confesó” que era una mujer, abandonar la adopción internacional y pasar a la nacional - Una pareja de mujeres peruanas que en España tiene dos hijas legales y reconocidas (cada una parió a una niña) pero que en Perú cada niña tiene una sola madre. Las madres pueden ser clandestinas pero las criaturas deberían tener reconocidos los mismos derechos aquí y allá, más allá de los límites de las fronteras que alguien decidió dibujar de esta manera. English: Vivir en la clandestinidad supone que sólo se habla cómoda y libremente cuando se tiene delante a otro igual. Así se comportan las madres clandestinas, esas madres que no han podido expresar libremente que son la otra madre de la criatura, que viajaron desde España a un país de América Latina a por su hija y fueron la cuñada o la amiga de la mujer que adopta. A pesar de todos los avances legislativos las diferencias de reconocimientos de los derechos de las personas LGTBQI en los diversos países iberoamericanos producen una clara vulnerabilidad en las familias lesboparentales y sobre todo en el reconocimiento de los derechos de sus hijos e hijas. Esas madres que han sido clandestinas a momentos, que han estado ahí, pero en secreto, aparecen en las narrativas etnográficas de mi investigación sobre las maternidades de las mujeres lesbianas en Catalunya: - Una pareja de mujeres que se planteó adoptar a una criatura en Nicaragua, cuando todavía en España no era legal ni el matrimonio ni la adopción por parte de personas del mismo sexo: una era la persona que adoptaba y la otra era la cuñada que la acompañaba en el viaje. Esa era la imagen de cara a las autoridades de aquí y de allá, en el hotel las dos eran las madres - Iniciar un trámite de adopción internacional como mujer sola, sin explicar nada, esperando que no preguntasen, guardando el secreto y cuando preguntaron si tenía pareja “confesó” que era una mujer, abandonar la adopción internacional y pasar a la nacional - Una pareja de mujeres peruanas que en España tiene dos hijas legales y reconocidas (cada una parió a una niña) pero que en Perú cada niña tiene una sola madre. Las madres pueden ser clandestinas pero las criaturas deberían tener reconocidos los mismos derechos aquí y allá, más allá de los límites de las fronteras que alguien decidió dibujar de esta manera. CR - Copyright; 2019 Asociación AIBR, Antropólogos Iberoamericanos en Red ER -