Apoyándonos en una dilatada observación participante en tres grupos de Alcohólicos Anónimos en la ciudad de Barcelona, se ha procedido a profundizar en la naturaleza espiritualista del contenido de las sesiones y en la naturaleza de los procesos deshabituadores de la dependencia del alcohol que promueve dicha lnstitución.Mediante un análisis crítico de las dinámicas personales e interpersonales observadas entre los asistentes a las sesiones, así como del examen de los métodos y premisas “doctrinales” promovidas en AA, se anota su semejanza con los procesos conocidos como Rituales de Paso. Dichos rituales, en su presencia en Alcohólicos Anónimos, y que en un primer análisis podrían entenderse que se producen durante el desarrollo de cada sesión en particular, en realidad se pretende que impregnen los procesos personales de construcción de la sobriedad. La insistencia de AA en prolongar sine die la asistencia personal a las sesiones, asumiendo con ello la dificultad de una sobriedad permanente, indicaría que dichos rituales representan una prolongada permanencia en la fase de liminalidad,. Dicha característica no encuentra parangón en las metodologías utilizadas en otros ámbitos deshabituadores, entre ellos la biomedicina.
English:Apoyándonos en una dilatada observación participante en tres grupos de Alcohólicos Anónimos en la ciudad de Barcelona, se ha procedido a profundizar en la naturaleza espiritualista del contenido de las sesiones y en la naturaleza de los procesos deshabituadores de la dependencia del alcohol que promueve dicha lnstitución.Mediante un análisis crítico de las dinámicas personales e interpersonales observadas entre los asistentes a las sesiones, así como del examen de los métodos y premisas “doctrinales” promovidas en AA, se anota su semejanza con los procesos conocidos como Rituales de Paso. Dichos rituales, en su presencia en Alcohólicos Anónimos, y que en un primer análisis podrían entenderse que se producen durante el desarrollo de cada sesión en particular, en realidad se pretende que impregnen los procesos personales de construcción de la sobriedad. La insistencia de AA en prolongar sine die la asistencia personal a las sesiones, asumiendo con ello la dificultad de una sobriedad permanente, indicaría que dichos rituales representan una prolongada permanencia en la fase de liminalidad,. Dicha característica no encuentra parangón en las metodologías utilizadas en otros ámbitos deshabituadores, entre ellos la biomedicina.
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